Proyecto Soto Norte, una apuesta sostenible por la protección del ambiente
Desde que Minesa llegó a la provincia de Soto Norte en Santander ha buscado construir de la mano de la comunidad una cultura ambiental que garantice de manera conjunta la protección del ecosistema.
El proyecto minero Soto Norte, ubicado en los municipios de California y Suratá en Santander, está diseñado técnica, ambiental y socialmente de manera integral, con estándares de sostenibilidad y participación comunitaria del área de influencia.
Esta propuesta, que actualmente se encuentra en etapa de licenciamiento ante la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla), busca extraer nueve millones de onzas de oro en un periodo de 21 años. Una de las grandes fortalezas del estudio de impacto ambiental que soporta el proyecto, es el alto volumen de información y conocimiento del territorio, permitiéndole a la empresa identificar los impactos y proponer las mejores alternativas de planes de manejo para garantizar un equilibrio y el cuidado del ambiente y el fortalecimiento de las comunidades vecinas.
Para Minesa, el agua y la construcción de una cultura ambiental que garantice su conservación y la del medio ambiente son la prioridad. El proyecto reutilizará el 90% del agua que se infiltre en la mina y la tratará para entregarla en las mejores condiciones. Además, tiene estimado una inversión por $44.000 millones en la calidad del recurso hídrico de la cuenca del río Suratá, que constituye un pilar fundamental que debe ser articulado a otros ejercicios de mejoramiento, planeación y ordenamiento de la sostenibilidad de la cuenca hídrica. Así mismo, una estrategia de siembra en alta montaña que ayude a la rehabilitación de la fauna, trabajo que ya inició con la plantación de 86.000 especies nativas entre los que se encuentran árboles como roble, laurel de cera, urapán, arrayán, siete cueros, cedro y cedro nogal.
Las labores ambientales de la Compañía se han concentrado en la protección y rehabilitación de los recursos hídricos de su área de influencia y así lo demuestran los hechos. Una de las acciones más representativas ha sido la recuperación de áreas intervenidas por antigua minería dentro de las que se destacan la recuperación de 4.3 kilómetros de la Quebrada La Baja, con limpieza de residuos sólidos, construcción de gaviones y revegetalización, así como la recuperación ambiental a través de la remoción de 360 toneladas de arenas mercuriadas, iniciativas que contaron con una inversión de $3.600 millones. También, se ha hecho control de drenajes ácidos de bocaminas de antigua minería, el desmonte de estas plantas ubicadas sobre rondas hídricas, y mejoras en acueductos rurales de California y Suratá.
Construcción de la cultura ambiental
Esta mirada integral también contempla a las futuras generaciones. Se han llevado a cabo jornadas de sensibilización para más de 1.000 niños en los municipios de Soto Norte donde el eje central era el cuidado del agua. Aquí se les enseñaba a través ejercicios culturales cómo ahorrar el líquido, no arrojar basura a fuentes hídricas y el cuidado ambiental en general.
Otra acción para la construcción de la cultura ambiental de Soto Norte nació hace cuatro años con las Guardianas Ambientales, un grupo conformado por 24 mujeres cabeza de hogar y dos hombres que trabajan con la comunidad en la concientización ecológica, el aprovechamiento de los residuos y recursos naturales y el embellecimiento de California, municipio donde estará ubicada la mina del proyecto.
Las acciones van desde el embellecimiento de zonas verdes, pintura, intervención de obras civiles, limpieza de cunetas, campañas de educación ambiental en temas como el manejo de los residuos sólidos trabajando con la tres R (Reducir, Reutilizar y Reciclar). El uso eficiente del agua y el uso consciente de la energía, al igual que celebrar todas las fechas del calendario ambiental como el Día del Agua, el Día de la Tierra, el Día Mundial del Reciclaje, Día Mundial del Medio Ambiente, hacen parte de la estrategia.
Sembratón, 8 mil árboles por 8 mil hojas
Sembrar árboles en las rondas hídricas de los ríos favorece a la conservación del agua de estos afluentes. Por eso, una escuela de líderes sociales apoyada por Minesa hizo una Sembratón de 8 mil árboles en cuatro barrios de las comunas I y II de Bucaramanga que bordean la ribera del Río Suratá y en el municipio que lleva este mismo nombre, que hace parte del área de influencia del proyecto.
La Sembratón llevó el nombre ‘8 mil árboles por 8 mil hojas’ haciendo referencia a las 8 mil hojas que tiene el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto. Esta jornada buscaba fortalecer la cultura ambiental en barrios vulnerables de Bucaramanga y fortalecer la ronda hídrica del Río Suratá.
La escuela de líderes contó con capacitaciones constantes en reforestación, reciclaje, disposición de desechos y cuidado del agua. A través de la Corporación Ambiental Tricoderma, ingenieros ambientales iban a los cuatro barrios de Bucaramanga a enseñarle a la comunidad cómo proteger su entorno.